jueves, 5 de agosto de 2010

CULTURA DE NEGOCIACION

"La paz no es la eliminación de las diferencias sino simplemente el manejo constructivo de las mismas". (William Ury, Profesor de Negociación, Harvard Law School).

Tanto la negociación como el ceremonial son considerados arte y ciencia, ambas tienen dos características comunes: son consideradas transdisciplinas y no son estáticas, es decir, incorporan los cambios en todas sus variables. Pero entre estos dos grandes temas que sirven de título a esta exposición, existe un hilo conductor. Se trata nada menos que de la cultura.

Asistimos a diario al continuo e incesante crecimiento de la actividad negociadora en todos los ámbitos y en todos los niveles. Empresas, sindicatos, gobiernos practican y participan activamente de negociaciones utilizando principios básicos en cuanto a la preparación de sus estrategias y es aquí donde las diversas culturas entran en juego.

Como paso introductorio resulta quasi imperativo establecer o acercar una definición de cultura, término éste que procede del latín cultivar. El sentido etimológico, entonces, proporciona una primera aproximación: la cultura no se refiere a lo que viene naturalmente dado, sino a lo que se ha cultivado.

El desarrollo de una sociedad y su cultura está definido entre otros por: los aspectos geográficos, la historia de las instituciones políticas, el desarrollo económico y la estructura social. Pero también se pueden observar cinco condicionantes primarios: la raza, la lengua, la familia, la religión y la patria.

Hoy en día, y a pesar de que la globalización ha provocado un mayor trasvasamiento entre los pueblos, se pueden señalar a las siguientes como las principales culturas del planeta:

1. la cultura oriental, distinguiendo entre ellas especialmente la cultura china, la hindú  y la japonesa;

2. la cultura árabe o islámica, y

3. la cultura occidental y dentro de ésta se pueden distinguir:

3.1 la cultura europea,

3.2 la norteamericana y

3.3 la latinoamericana.

¿Existe un protocolo del cual pueda entenderse como global o también como cultural? O será esto una redundancia teniendo en cuenta la naturaleza misma del protocolo.

En el afán de crear escenarios propicios para el desarrollo de negociaciones exitosas, el profesional de protocolo deberá asesorar al líder del equipo negociador en los aspectos culturales de los actores de la otra parte. Le ayudará responder preguntas tales como: ¿Quién saluda primero? ¿Cómo se saluda en oriente? ¿Cómo emplear los distintos tratamientos conforme al rango?

Pues bien, ¿Cuál es, entonces, el procedimiento a seguir? En realidad, no hay recetas mágicas simplemente debemos seguir los mismos pasos tal cual lo hacemos cuando nos encontramos frente al desafío de "crear" y "recrear" cualquier tipo de reunión solicitando la información necesaria y aplicándola según corresponda.

Se plantea aquí el siguiente dilema: ¿debería el negociador mimetizarse con la otra parte para no ser percibido como una amenaza sino como un aliado? ¿Debería acaso disfrazarse de lo que no es? O ¿debería ser él mismo? El asesoramiento en estos aspectos es competencia del agente de protocolo. De todas maneras, estoy segura en que todos coincidiremos que no es necesario adoptar una imagen que no sea la propia. Todo negociador es conciente y se capacita para ser él mismo y a la vez empatizar con la otra parte respetando sus códigos culturales.

Pues bien de eso se trata, de RESPETO. En tanto y en cuanto demostremos abiertamente respeto por otra cultura, otros usos y otras costumbres, sabido es que se nos respetará de igual manera. Como verán siempre se presenta como elemento constante la reciprocidad, aquello de "dar en justicia lo que le corresponde a cada persona", ni más ni menos.

Pero también la inducción de comportamiento, es decir, la construcción de un escenario cooperativo puede fallar, a cambio podremos sufrir –por ejemplo- un tratamiento descortés, ante esto debemos brindar -como profesionales del ceremonial- al equipo negociador todos los elementos para actuar en cada caso según corresponda.

Aunque a primera vista, los aspectos culturales resulten novedosos en cuanto a su tratamiento, estas consideraciones sobre la cultura en el marco de una negociación han sido tratadas desde lejanos tiempos. En el siglo XVIII el diplomático francés y secretario de gabinete de Luis XIV, François de Callières, recomendaba en su libro "Negociando con príncipes" a embajadores y ministros que negociaban en el extranjero "que debían adaptarse a los usos y costumbres del país donde se encontraren, sin mostrar repugnancia ni desprecio por sus habitantes, tal como suelen hacer algunos negociadores que elogian sin cesar la forma de vivir de sus propios países para así criticar en mayor grado a los otros."

De igual manera en el año 2000, el fundador del Harvard Euronegotiation Project, Prof. Juan Maleret en su "Manual de Negociación y Mediación", afirma que todo negociador encontrará diferencias entre un país y otro pero que estas mismas diferencias se manifiestan también en el ámbito nacional, claro que en menor escala y de manera más sutil. Apunta al respecto diciendo que la mayoría de los países presentan variaciones regionales y étnicas significativas, que afectan importantes elementos de la negociación, incluyendo la comunicación, la comprensión y la confianza.

Por ello, cuando negociamos con otra cultura debemos tener presente lo siguiente:

1. Entender las diferencias de comportamientos y actitudes de negociación

2. Explicitar claramente las diferencias culturales

3. Mostrar respeto y tolerancia

4. Entender el interés detrás de la postura

5. Ver cuáles son los intereses que motiva a la otra parte

6. No asumir que piensan igual que nosotros ni que poseen la misma escala de valores

7. No tomar actitudes ni palabras como ataques personales

8. Evaluar las alternativas al no acuerdo de las partes.

Algunos negociadores se sorprenden al comprobar que su formación cultural es considerada extraña, irracional e incluso, ofensiva en otros países. Es entonces en este esquema que se plantea la necesidad de una acción conjunta del equipo de respaldo, es decir el equipo de protocolo, con el equipo negociador en el momento previo o de la preparación y planeamiento de la estrategia negociadora.

La experiencia y preparación académica como agentes de protocolo, aportará los elementos necesarios que contribuirán al trazado de los pasos a seguir por el equipo negociador. Sobre esta base, ¿Qué recomendaciones deberíamos dar al líder del equipo de negociación en el caso de tener que llevar a cabo una negociación fuera de casa? Le será de gran utilidad contar con los Papeles de Trabajo elaborados por el equipo de respaldo de protocolo para proceder a incorporarlos a su estrategia o refinarlos conforme a sus propios objetivos.

Por ejemplo:

1. Cuándo.

2. Dónde.

3. Quiénes: conocer jerarquías.

4. Cuántos.

5. Sexos.

6. Inteligencia de información: recopilación de datos.

7. Acciones a realizar: llegada y partida.

8. Qué se deberá tener en cuenta en el caso de ser negociador local.

9. Preparar escenarios alternativos.

10. Elaborar distintos tipos de mesas.

11. Asesorar sobre la correcta ubicación de delegaciones.

12. Cómo recibir y presentar.

El equipo de respaldo y el equipo negociador deberán trabajar conjuntamente en estos aspectos, de tal modo de alcanzar una sinergia que le permita el lograr las metas deseadas con los más altos estándares de calidad y éxito.

Check list: Aspectos a estudiar para la negociación con personas de otras culturas:

1. Forma de trabajar (orientación hacia la tarea o interacción social).

2. Tiempo y espacio.

3. Idioma y pensamiento (contexto).

4. Forma de administración (management).

5. Relación grupo – individuo.

6. Rituales.

7. Importancia de clase social y status.

8. Valores.

9. Climatología: relacionada con la vestimenta (por ejemplo, demasiado calor con ropa pesada = incomodidad para negociar).

10. Jet-lag: cambios de usos horarios superiores a 4 horas precisan un día para aclimatarse.

11. Horario de las reuniones: si la primera reunión será en lunes, llegar el sábado anterior.

12. Cultura del anfitrión: conocimiento previo de los usos y costumbres "fuera de la mesa de negociación". Tener en cuenta: gestión del tiempo, imagen personal y etiqueta, formas de saludarse y tratamientos en relación con los sexos.

13. Pasajes, pasaportes y visas.

14. Tipo de cambio.

15. Medios de comunicación.

16. Hotel elegido: cuidado con el lujo desmedido.

17. Lugar de reuniones: neutral.

18. Conocimiento previo de fumadores y no fumadores (espacios para fumar, pausas).

19. Prever la agenda en función de las fechas, feriados y días festivos por religión.

20. Necesidad de traducción: ideal que sea miembro del propio equipo.

21. Si no lo es: procurar que sea especialista en negociación; al hablar mirar al interlocutor no al traductor; el intérprete se sienta detrás no a la mesa: no expresar en público el desagrado con el intérprete: debe estar presente en los actos sociales.

22. Obsequios, estudiar atentamente la cultura al respecto para que no se confunda una "atención" con "soborno". Tener en cuenta la reciprocidad en cuanto a los obsequios.

23. Tarjetas de presentación de doble cara con traducción al reverso.

Como corolario apunto a continuación las palabras del prólogo escrito por Don Sabino Fernández Campo (ex Jefe de la Casa Real española) al libro "Negociando con príncipes": "Es conveniente no moverse en la vida, en el puesto que se ocupa o en la misión que se nos encomienda, pensando únicamente en complacer sin objeciones ni reservas a aquel de quien dependemos, buscando la aprobación momentánea o los plácemes inmediatos, sin pensar en las consecuencias finales de un mal consejo o de una actuación desafortunada.

Los asesoramientos suelen ser aceptados con tanta o mayor complacencia, cuanto más coincidentes son con la manera de pensar y los propósitos de actuar, por caprichosos y erróneos que sean de la persona a quienes se proporcionan."

cultura de negociacion

jueves, 29 de julio de 2010

REGLASY ETIQUETA PARA HACER NEGOCIOS CON COLOMBIA

Reglas de etiqueta para hacer negocios con empresas de



Colombia


Al momento de una cita:


Debe programar sus citas con dos o tres semanas de anticipación. Disponga de


dos o tres horas para cada reunión.


No dependa del servicio de correo electrónico para programar sus citas, es más


recomendable que para ello use el teléfono o fax.


Se recomienda llegar a Colombia un día antes de su reunión de negocios, así


podrá ajustarse a la altitud de este país, especialmente si se dirige a Bogotá.


La forma de escribir la fecha en Colombia es: primero el día, luego el mes y


después el año.


La puntualidad es muy importante en la cultura de negocios de este país. Usted


deberá llegar puntual, sin embargo, es muy probable que sus colegas colombianos


no lo hagan y lleguen 15 0 20 minutos tarde.


El horario de los almacenes tiende a variar, pero generalmente es de 9:00 a.m. a


12:30 p.m. y luego de 2:00 p.m. a 7:00 p.m. de lunes a sábado.


Vestimenta para los negocios


Reglas de vestir para los negocios


Infórmese con anticipación sobre la vestimenta apropiada para los negocios,


específicamente en el lugar que visita. Posiblemente, en los lugares más cálidos se


pueda vestir de manera más informal.


Vista de manera conservadora pero elegante y moderna. Los colombianos lo


juzgarán por su vestimenta ya que consideran la ropa como un medidor de estatus.


Asegúrese de tener sus trajes limpios y planchados antes de viajar a Colombia.


El área de la costa es de ambiente más casual, por lo tanto, shorts o pantalones


cortos son totalmente aceptables.


En la costa, donde el clima es muy alto, algunos hombres visten guayaberas para


trabajar, y las mujeres usan vestidos sin mangas. Sin embargo, usted deberá vestir


formal para las reuniones de negocios.


Aunque Colombia se encuentra en la zona ecuatorial, hay varias ciudades muy


elevadas que son frías. Si usted se dirige a estas ciudades deberá llevar una


chaqueta o suéter de lana.


Es importante que usted conserve una vestimenta apropiada mientras negocia.


Los hombres deben vestir trajes de colores oscuros, corbatas conservadoras y
zapatos de vestir. También deberá usar traje y corbata en las reuniones sociales,



aunque sea en una zona calurosa.


El atuendo apropiado para las mujeres es un traje o vestido para los negocios, y


un vestido tipo cocktail para las ocasiones sociales.


Por lo general, los colombianos son muy detallistas. Asegúrese de llevar unos


zapatos modernos, en buen estado y bien pulidos.


Por regla general, los colombianos sólo usan zapatos deportivos cuando hacen


ejercicios.


La higiene es muy importante, los hombres deben tener un corte de cabello sobre


el cuello y las mujeres deben lucir siempre impecables y profesionales.


Conversación


Temas de conversación apropiados


Reglas Generales:


Es recomendable que, antes de su visita, aprenda un poco de la historia y cultura


de Colombia. Por lo general, los colombianos se sienten muy orgullosos de su cultura


y logros nacionales, por lo tanto, saber un poco de ello, será una buena estrategia


para iniciar una buena relación.


Es de buena educación mantener contacto visual mientras conversa.


Temas de conversación bienvenidos:


Aspectos positivos de Colombia.


Historia, literatura, arte y música colombiana.


Café.


Cocina.


La ciudad que visita.


La ciudad donde reside.


Temas que se deben en principio evitar:


Política.


Terrorismo.


Religión.


Drogas ilegales.


Carteles de tráfico de drogas.


Comentarios negativos sobre las corridas de toros.


Quejas sobre la ciudad que visita.


Diferencias entre la cultura colombiana y la suya.


Quejas de cualquier tipo.